No todos los tipos de chocolate son iguales y algunos pueden ser más adecuados para quienes necesitan controlar sus niveles de azúcar en la sangre.
En general, el chocolate negro suele ser la mejor opción para las personas con diabetes. Esto se debe a que cuanto más alto sea el porcentaje de cacao en el chocolate, menor es su contenido de azúcar. El chocolate negro con un contenido de cacao superior al 70% suele tener un índice glucémico más bajo en comparación con otras variedades de chocolate.
Además, el chocolate negro también contiene antioxidantes que pueden tener beneficios para la salud, como la mejora de la función cardiovascular y la reducción del riesgo de enfermedades crónicas.